¿Por qué -o para qué- hacer un blog? La cuestión no carece de importancia: un blog visibiliza o, por decirlo de otro modo, «muestra». Es como un escaparate… y, si esto es así…¿por qué querría alguien mostrarse en público?
Hay una primera respuesta posible: por necesidades laborales. En el mercado capitalista una mercancía sólo se vende en condiciones favorables para el propietario si éste es capaz de mostrarla útil y bella (= barata) en el escaparate.
Pero esa respuesta primera no es siempre una respuesta pertinente y puede llegar a resultar impertinente (porque «se hace particularmente fea» –¿pero qué dice éste? ¡los intelectuales o los artistas fuerza de trabajo! ¡A dónde vamos a llegar!»-).
Por eso quiero brevemente ensayar otra (fácil… pero, al menos…, «otra»): no se quiere aquí montar -aunque se haga- un escaparate… se pretende construir y mostrar la pertinencia de una intervención sobre el mundo: de una «obra» si se prefiere. Un lugar común, claro. Pero ¿cabe una respuesta distinta?